Los meses de
invierno y de verdadero frio no suman ni la mitad de los 365 días del año, y
aún así se nos suelen hacer muy cuesta arriba. Aprovechar los últimos días de
vacaciones que nos quedan, encontrar ofertas
de esquí para Vallnord, u ofertas de ski, como lo llaman los ingleses, y deslizarte por sus pistas es una de las
mejores formas de combatir el frio y disfrutar de él.
Aunque la
mayoría de las personas aprende este deporte de pequeño, muchos son los adultos
que nunca han esquiado. EL miedo intrínseco de las personas a hacerse daño nos
cohíbe y hace que rechacemos actividades con las que seguro que disfrutaríamos.
Sólo vemos la longitud de los esquís,
pensamos en lo dura y fría que está la nieve, en los moratones y las agujetas
del día siguiente.
Todos
conocemos a alguien que se ha roto algo esquinado, pero lo mismo podría pasar con
el futbol, y no por eso dejamos de jugar o nos damos por vencidos. Gracias a
las ofertas de esquí en Vallnord, Andorra, tanto niños como mayores pueden deleitarse con el
aprendizaje de este deporte, pues si dejas a un lado los prejuicios, la
diversión está asegurada.
Una vez se
nos pasa la impresión y nos hemos puesto los esquís, llega el segundo
obstáculo, la movilidad. Las ofertas de esquí en Vallnord nos aportan el
momento perfecto para familiarizarnos con las sensaciones de un nuevo equipo y el
desplazamiento sobre la nieve. Encontrar la postura adecuada que nos permita
deslizarnos correctamente y que nuestros cuerpos fluyan. Nuestra posición debe
ser lo más relajada y cómoda posible, libre de tensión y con los pies en
paralelo y separados a la altura de las caderas.
Cuando haces
uso de tu oferta de ski en Vallnord por
primera vez y contratas a un monitor que te enseñe las bases es importante
familiarizase: inclinar los pies hacia delante, comprobar que ahí controlas
mejor, después hacerlo hacia atrás y ver que pierdes el equilibrio mas
fácilmente... se trata de perder el miedo y jugar, los niños tienen menos
problemas que los adultos porque saben jugar.
Una vez
tenemos esto dominado es hora de aprender a hacer la cuña, el momento de las
primeras caídas y la parte complicada, levantarse. Es un momento esencial en el
que te das cuenta de que no te has roto nada y de que no vas a hacer el ridículo
porque todos hemos pasado por eso.